viernes, 6 de marzo de 2009

YA ES VIERNES




Hola a todos/as:
Para aquellos que estabais preocupadillos, deciros que estoy completamente bien del proceso griposo que me ha tenido unos días jodido. Empecé a tomar antibioticos, fluidificantes y todo empezó a mejorar de inmediato.
Sigo muy bien y estoy muy motivao. Tengo las pilas superpuestas y me encuentro superagusto por aquí, tanto con los hondureños como con la peña española que anda (somos ahora mismo aquí en Tegu unos 15).
Anoche estuvimos de cervezas en plan litrona (si habeis leido bien, aquí tb las hay= celebrando lo del Sevilla yo y ahogando la pena el otro sevillano que resulta que es palanganilla. No tiene que ver con nuestra Cruzcampo pero a falta de pan ......... se llama Imperial y se deja beber (como podeis comprobar estoy totalmente curao).
Sigo con mis tareas sanitarias sobre todo. Hoy mismo he ido a un consultorio de un médico hondureño que asiste por la voluntad y que colabora con ACOES. He estado hablando con él para ver las patologías más frecuentes que suele ver y poder facilitarle las medicinas que más necesidad tenga. A la misma vez me he informado del protocolo ya que voy a desparasitar a los niños de las escuelas infantiles (tto paliativo y preventivo con pastillas).
La consulta os la podeis imaginar. Una casita de unos 20m con un almacen de medicinas, un aseo y un despacho con una mesa y dos sillas (una para el médico y otra para el paciente). Por no haber no tiene ni una camilla. Los tratamientos que manda, si tiene la medicación se las dá directamente al paciente (los jarabes los da en una bolsita de las que se meten las chuches y así el bote sirve para unos cuantos) y sino le dá una receta para la farmacia (no hace falta deciros que en ese caso se las tienen que costear integramente). No cobra la consulta, salvo la voluntad del paciente.
Los costes de las medicinas son similares que en España con la diferencia de que el sueldo medio de un hondureño (el que trabaje) son aprox. 200 euros y el seguro en principio te costea las medicinas dandotelas en mano (en farmacias no) pero la mayoría de las ocasiones no tienen casi de nada. Me ha comentado un hondureño esta mañana que la última vez que fué al hospital con su mamá tuvo que ir a la farmacia para comprar el cateter para que le pudieran poner un suero a su madre xq no tenían. Por aquí una cita tarda mínimo 5-6 meses, cuando vas si tienen medicinas te las dan sino tienes q ir a la farmacia por ellas y pagarlas. Los pensionistas sólo les descuentan un 25% del coste de la medicación. Imaginaros la situación que se vive aquí.
Pero hay mucho hospital privado para unos pocos y consulta médicas privadas que se enriquecen a través de la necesidad de los demás. Aquí los sanitarios en general están muy mal vistos ya que los ven como buitres que no les interesa la asistencia y sólo enriquecerse a costa de los demás. Son unos privilegiados que no tienen el más mínimo compromiso social. Salvo la consulta que os refiero más arriba del texto es casi inimaginable que algún sanitario hondureño se preste a realizar alguna labor de forma altruista y eso me lo han corroborado todos ya que desde aquí se han dirigido a muchos de ellos con una negativa como respuesta a la gratuidad de su trabajo.
Ayer estuve en dos escuelistas dónde a niños se les da clases de apoyo y una comida (para que se les pueda admitir en ellas tienen que ir a la escuela pública). Me encargé de llevarles un pequeño botiquín con material de curas, y alguna medicación básica (analgesicos y antipiréticos) y explicarles a las maestras como utilizarlos. No os podeis imaginar, sobre todo en la escuelita con niños más necesitados, el recibimiento que nos dieron. Abrazados a las piernas y con los brazos levantados para que los cogiera y cuando lo hacías te daban un beso y sólo verles la cara te ponías a punto de llorar. Tienen una carencia de afecto que no se puede uno imaginar. A un simple beso o una sonrisa reaccionan con esa alegría y ese brillo en la cara que sólo un niño puede mostrar. A una de ellas le acababan de pegar un pedrada en la frente, la curé y apenas me protestó. Es un torrente de emociones lo que tienes al compartir con ellos unos minutos.
De camino a la escuelita pasamos por dónde viven y no tienes ojos para ver las condiciones. Calderos en las calles, casas de juguete, suciedad y falta de higiene. Y niños por tos lados. Sobre todo en esos barrios se da la poligamia a tal nivel que algunas mujeres compiten entre ellas para ver quién tiene más hijos de tal o cual hombre. INCREIBLE.
Hoy también empezé mis clases de apoyo de Matemáticas a los chavales de aquí de la misión. Percibo el agradecimiento en sus silencios, en sus miradas y gestos. Y sólo eso me llena y me complace enormemente. Pero les hace tanta falta. El nivel educativo es ínfimo. Tienen unas carencias de todo. Aquí un estudiante universitario, dificilmente pasaría a la ESO en España en muchas asignaturas. No lo digo yo, lo dicen la peña española que les da clases y que llevan aquí mucho tiempo.
Os quiero a todos/as y que os siento ahí, me acuerdo de todos cada vez que escribo y espero transmitiros algunas de mis sensaciones con estas líneas. Necesito saber que estais ahí y leo con muchisima alegría y agrado todos vuestras líneas de ánimo.
UN BESAZO Y UN GRAN ABRAZO